Qué significa la palabra ERTE
En los últimos meses, hemos escuchado mucho la palabra "ERTE" en los medios de comunicación y en conversaciones cotidianas. Sin embargo, para muchas personas puede resultar confuso entender su significado y cómo afecta a los trabajadores. Exploraremos en detalle qué significa la palabra ERTE y cómo se aplica en el ámbito laboral.
Analizaremos qué es un ERTE, cuándo se puede aplicar, cuáles son los requisitos para solicitarlo y cómo afecta a los trabajadores. También veremos ejemplos de situaciones en las que se ha aplicado un ERTE y las consecuencias que puede tener tanto para los empleados como para las empresas. Además, daremos algunos consejos sobre cómo actuar si te encuentras en una situación de ERTE o si estás considerando solicitarlo como empresa.
Qué es un ERTE y cómo funciona
Un ERTE, o Expediente de Regulación Temporal de Empleo, es una medida que permite a las empresas suspender temporalmente los contratos de trabajo o reducir la jornada laboral de sus empleados de forma temporal y excepcional.
Esta medida se utiliza en situaciones de crisis, como la que estamos viviendo actualmente debido a la pandemia del COVID-19, cuando las empresas se ven obligadas a reducir su actividad o incluso cerrar temporalmente.
¿Cómo funciona un ERTE?
Un ERTE se lleva a cabo a través de un procedimiento administrativo en el que la empresa presenta una solicitud ante la autoridad laboral competente, justificando las causas que motivan la adopción de esta medida.
Una vez aprobado el ERTE, la empresa puede suspender los contratos de trabajo o reducir la jornada laboral de sus empleados durante un período determinado de tiempo. Durante este tiempo, los trabajadores afectados por el ERTE pueden percibir una prestación económica por desempleo, que será abonada por el Servicio Público de Empleo Estatal.
Tipos de ERTE
Existen diferentes tipos de ERTE, en función de las causas que lo motivan:
- ERTE por fuerza mayor: se utiliza cuando la empresa se ve obligada a suspender su actividad debido a circunstancias imprevistas e inevitables, como un desastre natural o una epidemia.
- ERTE por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción (ETOP): se aplica cuando la empresa atraviesa dificultades económicas, tecnológicas, organizativas o de producción que justifiquen la adopción de esta medida.
- ERTE por causas productivas: se utiliza cuando la empresa necesita ajustar la producción a la demanda del mercado, optando por la reducción de la jornada laboral.
Un ERTE es una medida que permite a las empresas suspender temporalmente los contratos de trabajo o reducir la jornada laboral de sus empleados en situaciones de crisis. Este procedimiento es regulado por la autoridad laboral competente y los trabajadores afectados pueden percibir una prestación económica por desempleo mientras dure el ERTE.
En qué situaciones se puede aplicar un ERTE
Un ERTE, o Expediente de Regulación Temporal de Empleo, es una medida laboral que permite a las empresas reducir la jornada de trabajo o suspender contratos de forma temporal debido a circunstancias excepcionales. Estas circunstancias pueden ser de índole económica, técnica, organizativa o de producción, y deben ser justificadas y aprobadas por la autoridad laboral correspondiente.
Existen diferentes situaciones en las que se puede aplicar un ERTE:
Fuerza mayor
Se considera fuerza mayor cuando existen circunstancias imprevisibles, inevitables y ajenas a la voluntad de la empresa que impiden el desarrollo normal de la actividad laboral. Esto puede incluir situaciones como catástrofes naturales, epidemias o crisis económicas.
Causas económicas, técnicas, organizativas o de producción
En este caso, la empresa debe demostrar que se encuentra en una situación económica difícil, que existen cambios tecnológicos que requieren ajustes en la plantilla, que se necesita reorganizar la estructura de la empresa o que hay una disminución en la demanda de los productos o servicios ofrecidos.
Una vez que se justifica la situación y se solicita el ERTE, se debe seguir un proceso que incluye la negociación con los representantes de los trabajadores y la aprobación por parte de la autoridad laboral competente. Durante la vigencia del ERTE, los trabajadores afectados pueden percibir una prestación por desempleo o una compensación económica establecida en el acuerdo alcanzado.
Un ERTE es una medida que permite a las empresas ajustarse a situaciones temporales complicadas, ya sea por fuerza mayor o por causas económicas, técnicas, organizativas o de producción. Su aplicación implica un proceso de negociación y aprobación, y brinda a los trabajadores afectados una protección económica mientras se recupera la normalidad.
Cuáles son los derechos y deberes de los trabajadores durante un ERTE
Un ERTE, o Expediente de Regulación Temporal de Empleo, es una medida que permite a las empresas suspender o reducir temporalmente los contratos de trabajo de sus empleados debido a causas económicas, técnicas, organizativas o de producción. Durante un ERTE, los trabajadores tienen una serie de derechos y deberes que deben conocer y cumplir.
Derechos de los trabajadores durante un ERTE:
- Derecho a percibir una prestación por desempleo: Durante un ERTE, los trabajadores tienen derecho a solicitar y recibir una prestación por desempleo. Esta prestación económica les ayudará a compensar la pérdida de ingresos durante el periodo en el que sus contratos estén suspendidos o reducidos.
- Derecho a ser informados: Las empresas están obligadas a informar a los trabajadores sobre la situación del ERTE, incluyendo los motivos, duración, condiciones y consecuencias para los empleados.
- Derecho a reincorporación: Una vez finalizado el ERTE, los trabajadores tienen derecho a ser reincorporados a sus puestos de trabajo en las mismas condiciones que tenían anteriormente.
- Derecho a formación: Durante un ERTE, los trabajadores tienen derecho a recibir formación por parte de la empresa o de organismos públicos para mejorar sus competencias y habilidades profesionales.
Deberes de los trabajadores durante un ERTE:
- Deber de colaborar: Los trabajadores deben colaborar con la empresa y seguir las instrucciones que se les den durante el ERTE.
- Deber de mantener la disponibilidad para el trabajo: A pesar de la suspensión o reducción de los contratos, los trabajadores deben estar disponibles para ser llamados a trabajar en caso de necesidad.
- Deber de comunicar cambios en la situación personal: Los trabajadores deben informar a la empresa de cualquier cambio en su situación personal que pueda afectar a su situación laboral, como cambios de dirección, cuenta bancaria, etc.
- Deber de participar en acciones formativas: Si la empresa o los organismos públicos ofrecen acciones formativas durante el ERTE, los trabajadores tienen la obligación de participar en ellas y aprovechar las oportunidades de mejorar sus conocimientos y habilidades.
Es importante que tanto los trabajadores como las empresas conozcan los derechos y deberes durante un ERTE para así garantizar un proceso justo y equitativo para ambas partes.
Cómo afecta un ERTE a las prestaciones por desempleo
Un ERTE, o Expediente de Regulación Temporal de Empleo, es una medida que permite a las empresas suspender temporalmente los contratos de trabajo de sus empleados o reducir su jornada laboral de forma significativa. Esta medida se adopta en situaciones excepcionales, como crisis económicas o situaciones de fuerza mayor, y tiene como objetivo principal evitar despidos masivos y el cierre de empresas.
Cuando se produce un ERTE, es importante entender cómo afecta esto a las prestaciones por desempleo de los trabajadores afectados. En general, los empleados que se encuentren en esta situación podrán acceder a una prestación económica por desempleo, siempre y cuando cumplan con los requisitos establecidos por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).
Requisitos para acceder a las prestaciones por desempleo
Para poder solicitar la prestación por desempleo durante un ERTE, es necesario cumplir con los siguientes requisitos:
- Estar afiliado y dado de alta en la Seguridad Social.
- Tener al menos 360 días cotizados en los últimos 6 años.
- En el caso de un ERTE por reducción de jornada, se debe tener una reducción de al menos el 10% de la jornada laboral.
Además, es importante tener en cuenta que durante un ERTE, el trabajador no puede realizar actividades laborales por cuenta propia o ajena, a excepción de algunos casos específicos establecidos por la normativa vigente.
Proceso de solicitud de la prestación por desempleo
Una vez que se cumplan los requisitos mencionados anteriormente, el trabajador debe solicitar la prestación por desempleo ante el SEPE. Este proceso generalmente se realiza de forma online, a través de la página web oficial del SEPE, aunque también es posible realizarlo de forma presencial en las oficinas de empleo correspondientes.
Es importante tener en cuenta que durante el proceso de solicitud, se deberán proporcionar documentos que acrediten la situación de ERTE, así como la documentación personal necesaria.
Beneficios y duración de la prestación por desempleo durante un ERTE
La prestación por desempleo durante un ERTE tiene una duración máxima de 180 días, aunque este período puede variar dependiendo de la situación económica y laboral de cada trabajador. La cuantía de la prestación dependerá del salario que se haya percibido antes de la suspensión o reducción de jornada.
Es importante destacar que durante el periodo de percepción de la prestación por desempleo, el trabajador deberá cumplir con ciertos requisitos establecidos por el SEPE, como la búsqueda activa de empleo y la realización de cursos de formación si se le requiere.
Un ERTE puede afectar las prestaciones por desempleo de los trabajadores, pero también puede ser una medida que evite despidos masivos y cierres de empresas en situaciones excepcionales. Es importante conocer los requisitos y el proceso de solicitud para poder acceder a estas prestaciones durante un ERTE.
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